Opinión

Lula y el Perú: ¿las relaciones serán diferentes durante su tercer mandato? (III)

Por Enrique Amayo Zevallos

Ph.D.Past Profesor. Fundador: Núcleo de Investigaciones sobre el Pacífico y la Amazonia-NPPA. Universidad del Estado de São Paulo-UNESP. ea.zevallos@unesp.br

Lula y el Perú: ¿las relaciones serán diferentes durante su tercer mandato? (III)Foto: Contraloría General de la República

IV. La cuestión amazónica

En su largo discurso inaugural, Lula afirmó que Brasil era dueño de la mayoría de la Amazonía. Uno de los objetivos de dicha mención era recuperar el Fondo Amazónico- FA de aproximadamente 3 mil millones de soles. De ese Fondo más del 80% es donado por Noruega y el resto por Alemania con un objetivo: apoyar actividades para preservar la Amazonia brasileña. Esa razón, totalmente opuesta a las políticas destructivas de Bolsonaro llevó a que este la tildara de “intervencionista” en su país; y como muestra de independencia declaró que usaría los recursos del FA como quisiera. Por eso los dos países europeos congelaron el FA por años. Luego del discurso de Lula, dicho fondo fue liberado.

Nadie discute que Brasil tiene la mayoría del territorio de la Amazonia; sin embargo importa decir que mayor tamaño no necesariamente significa calidad. Aceptando el criterio de tamaño, jamás escuché que el Perú tuviera acceso a un fondo similar. Debe ser por falta de voluntad política para construir proyectos preservacionistas ya que recursos existen, especialmente de Noruega, que controla el más grande fondo soberano del mundo con más de un billón de dólares.

Hay que recordar que el país escandinavo tiene especial interés por el Perú, acentuado desde 1947 cuando el científico-explorador y héroe cultural noruego, Thor Heyerdahl, con ayuda de la Marina Nacional Peruana construyó, en sus astilleros del Callao, la balsa Kon Tiki con la cual navegó hasta la Polinesia. Aventura exploratoria, entre las más importantes del Siglo XX, que demostró al mundo que las civilizaciones del Antiguo Perú tenían capacidad naval, conocimientos astronómicos y marítimos suficientes para realizar expediciones transoceánicas, cruzando el océano más grande de la Tierra, El Pacífico, mucho antes que los europeos.

Volviendo al presente; usando una lógica parecida a la del Brasil para realizar proyectos de protección de su Amazonia, el Perú podría aspirar a un FA proporcional al tamaño de nuestro territorio amazónico. La Cuenca Amazónica- CA tiene aproximadamente 7 millones de Kms.2 y de ellos, cerca de 4 millones - área casi igual a la suma de Europa Occidental y Central- son territorio brasilero. El Perú posee casi 950,000 Kms.2, un área correspondiente al de Alemania y Noruega juntos; así la Amazonia Peruana es casi el 25% de la Amazonia Brasileña. Por tanto si el FA obtenido por Brasil es de casi 3 mil millones de soles el Perú podría obtener aproximadamente 800 millones.

Poseer la mayoría de la Amazonia lleva a Brasil a sentir, y por tanto repetir a través del tiempo, a nivel interno y externo, que esa región es suya. En Brasil la creencia de que la Amazonia es solo brasileña es tan difundida que es casi un mito, reforzado porque su geografía no acepta la existencia del Rio Amazonas fuera de sus fronteras. Es llamado así sólo a partir de Manaos, lugar donde se une un río de aguas claras que llega del Perú que llaman SOLIMOES, con otro de aguas oscuras que llega de Colombia, llamado río Negro. Es casi imposible en Brasil escuchar en noticieros o en reuniones académicas que la Amazonia sea una Región Sudamericana Compartida. Y esa imagen es aceptada casi consensualmente a nivel internacional; que eso sea así no es culpa solo de los brasileños pues los otros países amazónicos prácticamente no hacen nada para corregirla.

Personalmente jamás escuché en el exterior, en eventos relacionados con la Amazonia, a representantes del Perú defendiendo y explicando, por ejemplo, que la geografía internacional reconoce que el rio Amazonas, que recorre casi 7,200 kms. hasta llegar al Atlántico frente a la maravillosa Isla Marajo (casi 3,000 kms. son recorridos en el Perú) nace en el imponente nevado Mismi de casi 6mil metros de altitud localizado en Arequipa; que sin las aguas de los nevados tropicales - el Perú concentra los más grandes de la Tierra - el Río Amazonas no existiría; que ya los Incas sabían de su excepcionalidad al punto que lo llamaron Apu Mayo o Señor de los Ríos; que sin el gigantesco paredón conformado por esas montañas andinas las masas de nubes, formadas en los bosques del centro de África y transportadas por vientos que cruzan el Atlántico, chocan finalmente con ellas originando copiosas lluvias fundamentales para el gran volumen de aguas del sistema amazónico. Resulta así claro que sin esos Andes no existiría Amazonia.

Pero esta vez, en las conversaciones que siguieron a la toma del poder de Lula, en algún momento se escuchó una voz que dijo “defendamos la Amazonia juntos”: era el Presidente de Colombia Gustavo Petro hablando. Posteriormente, el 3 de enero, se informó que Lula, en reuniones bilaterales, trató de la futura reunión cumbre sobre la Amazonia que sería organizada por la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica - OTCA. Reuniones que fueron hechas con los Presidentes de Colombia, Bolivia (Luis Arce) y Ecuador (Guillermo Lasso); también con el Primer Ministro de nuestro país Alberto Otárola y con el Presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Jorge Rodríguez.

Así de pronto podría revivir la OTCA que, en el papel, es el tratado más importante que existe para cuidar, colectivamente y en términos de igualdad, los problemas de la Cuenca Amazónica. El lector no especializado difícilmente creerá que existe ese tratado ya que casi sólo los especialistas saben de su existencia; hace años que la prensa difícilmente lo menciona. Pero la OTCA nació el 3 de julio de 1978 como Tratado firmado por los 8 países independientes que comparten la Cuenca Amazónica: Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela; la Guyana Francesa, que también posee territorio amazónico, no fue aceptada como miembro porque, para la ONU, tiene status colonial.

La OTCA anduvo muy bien mientras su Secretaria General tenía el Status de Pro Tempore. Círculo por años entre los países miembros hasta el año 2003, primer año del primer gobierno de Lula, cuando Brasil propuso y obtuvo apoyo consensual para que Brasilia fuera la sede de su Secretaria Permanente. Desde entonces fue asfixiada, fagocitada, tanto por los ya mencionados intereses brasileros como por la actitud de los otros países amazónicos. Su inutilidad llegó a ser tan evidente que, por lo menos en un caso, la Secretaria General renunció porque se sentía una figura decorativa que no tenía nada importante para hacer: por eso decidió dejar Brasilia y regresar a su país.

Resulta excelente entonces que la OTCA organize una cumbre de los presidentes de los países amazónicos. Reunión que, cuando se escribe esta nota, no tiene definido el lugar de su realización pero que será organizada por su Secretaría General actual, la ex Ministra Consejera de la Embajada de Bolivia en México, María Alejandra Moreira López.

V. La tarea del gobierno peruano

En este escenario preocupa que la señora Dina Boluarte, al explicar su no presencia en Brasilia en la toma del poder por Lula, diga que “nuestro gobierno apuesta por reforzar la relación bilateral con el hermano país de Brasil, enfatizando la agenda de integración sudamericana y la sostenibilidad de la Amazonia”. O sea, como se diría en el Brasil: “todo como antes en el cuartel de Abrantes!!!!”. Lo que Boluarte dice lleva a imaginar qué para ella la relación con el Brasil, por lo menos en el periodo en que el Partido de los Trabajadores en el poder con Lula y Dilma Rousseff fue tan buena para el Perú que hay que reforzarla. Lo que lleva a preguntarse: ¿Ella tiene asesores? ¿No le informaron que Lula hizo lobby para Odebrecht? ¿Que la Odebrecht, contando con préstamos casi ilimitados, con intereses debajo del mercado, del gobierno brasileño a través del Banco de Desarrollo Económico y Social - BNDES realizó obras gigantes en el Perú, como la Carretera Interoceánica, que de un presupuesto original de casi 800 millones de dólares acabó costando casi 3 mil millones a nuestro país? ¿Está dispuesta a ir detrás de un tácitamente autoproclamado “líder natural”? ¿Le resulta imposible decir que la integración avanza democráticamente cuando tiene líderes electos y rotativos como ha sido, hasta ahora, la Alianza del Pacífico? ¿Sabe que es el Sistema de Vigilancia Nacional del Perú? ¿Sabe que el Brasil de Lula intentó venderle caro al Perú la tecnología para dicho sistema cuya tecnología había demostrado que era inútil? ¿Porque no aprovecha la próxima reunión de Presidentes de la Organización del Tratado Amazónico - OTCA para proponer que la próxima sea en un territorio peruano de la Alta Amazonia como Machu Picchu, el principal tesoro de la Amazonia Sudamericana, para que así las más altas autoridades brasileñas tomen conciencia de que en su inmensa Amazonia no tienen un centímetro de Alta Amazonia y menos de la extraordinariamente mega diversa Ceja de Selva donde se ubica Machu Picchu? ¿La Presidenta Dina cuenta con asesores bien informados que puedan pasarle esa y mucha otra información valiosa para poder tratar con realismo al Brasil? ¿No tiene? ¿Será que no tiene porque el sistema universitario peruano actual tiene promedios internacionales cada vez más bajos y con los golpes a la SUNEDU serán más bajos todavía? ¿O solo tiene asesores formados para hacer negocios orientados por los “principios” del “Perro del Hortelano”?

Ojalá el gobierno peruano tome en cuenta lo anterior pues su objetivo debería ser establecer, en este caso con Brasil, relaciones horizontales lo que sería excelente para el futuro de los dos paísess. Con ese objetivo y como asunto final la Presidenta tiene que saber también que geopolíticamente el Perú posee ventajas extraordinarias. No solo por sus Andes Tropicales y las dimensiones de nuestra riquísima Alta Amazonia. También porque es el país más occidental de América del Sur y está a menor distancia del eje de la economía mundial actual: costa Occidental de EUA, China y Japón. La economía del Pacífico aumenta su peso en el mundo y el Perú tiene, en el Pacífico Sudamericano, la posición más privilegiada. No olvidemos que la Carretera Interoceánica es la única salida del Brasil al Pacífico, la que por intereses políticos electorales internos, después de haber hecho de todo para que el Perú la construya, no es utilizada por nuestro gran vecino. Pero en el mediano plazo, cuando el Puerto de Chancay se convierta en el puerto hub del Pacífico sudamericano, Brasil obligatoriamente tendrá que usarlo y entonces esa carretera resultará vital. Pero para que eso tenga alguna posibilidad de transformarse en realidad nuestra Presidenta no debería aceptar ningún asesor recomendado por Lula (como fue el caso de Ollanta Humala y de la Alcaldesa de Lima Susana Villarán entre otros) pues así este estaría informado, gratis y sin esfuerzo, de todo lo organizado y planeado por el gobierno peruano.

El gobierno del Perú tiene instrumentos únicos para negociar con el Brasil de Lula. No los desaprovechemos.

Florianopolis, 5 de enero del 2003