Cajamarca

Desabastecimiento de agua potable en Cajamarca causa malestar y preocupación en la población

Por Ronald Ordóñez

Corresponsal en Cajamarca

Desabastecimiento de agua potable en Cajamarca causa malestar y preocupación en la poblaciónFoto: stakeholders

Entre el lunes y martes de esta semana, la población de la ciudad de Cajamarca empezó a verse desabastecida del servicio de agua potable. Si bien, debido a la ausencia de lluvias se está racionalizando la dotación de agua, de un momento a otro, el servicio fue interrumpido en su totalidad, generando preocupación y molestia.

El martes en la mañana, la empresa SEDACAJ emitió un comunicado señalando que el caudal del río Grande, principal alimentador, había bajado de manera considerable afectando el ingreso de agua a la planta de tratamiento El Milagro, variando la captación de 200 litros por segundo a solamente 90 litros por segundo. Este mismo día, SEDACAJ anunció la sectorización del servicio y el abastecimiento a través de cisternas.

No obstante, con el paso de las horas, la molestia se empezó a dirigir hacia Minera Yanacocha que opera en las inmediaciones del río Grande, debido a que SEDACAJ informó que la disminución del caudal fue abrupta y no tenían mayor conocimiento de lo que había ocurrido, así también, porque en las redes sociales se empezaron a difundir imágenes en las que se apreciaba agua con aparentes sedimentos y las compuertas para la salida del líquido elemento que estaban cerradas, que de acuerdo a las primeras versiones, había sido decisión de la empresa minera.

Justamente, en declaraciones a medios locales, el gerente de SEDACAJ, Marco Narro, confirmó esta información, cuestionando que la empresa minera no les haya comunicado de manera previa: “Lamentablemente Yanacocha no nos dio a conocer que iban a cerrar las compuertas”, señaló.

El jueves 3 de noviembre el servicio de agua fue restablecido de manera paulatina y SEDACAJ informó que el río Grande aumentó nuevamente su caudal, mejorando por lo tanto, la capacidad de producción en la planta de tratamiento El Milagro.

Este mismo día se realizó una inspección en la zona con la participación de la Defensoría del Pueblo, Municipalidad de Cajamarca, Autoridad Nacional del Agua, Ministerio Público, entre otros. En el lugar, un funcionario de la empresa minera confirmó que se cerraron las compuertas en un dique debido a que por la ausencia de lluvias se tenía un nivel bajo de agua, lo que involucraba que pueda trasladarse sedimentación que podía afectar la calidad de agua. Es por eso que se esperó que se tenga una mayor carga para evitar que los sedimentos fluyan por el río Grande.

Pese a las explicaciones, se sigue cuestionando el papel de la empresa minera en un distrito que durante años ha registrado conflictos precisamente por el uso del agua. La población espera que las autoridades garanticen en primer lugar, el agua para consumo humano, en tanto, periodistas y analistas consideran que esta situación bien podría iniciar un nuevo conflicto.