Opinión

"La ciudad sumergida" de Flores Galindo

Por Juan Antonio Lan

Autor de Sida y temor. Estudió el pregrado en la PUCP y la maestría en Historia en la FLACSO-Ecuador. Analista de comunicaciones del Vicerrectorado de Investigación de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya y administra la plataforma digital El Reportero de la Historia.

"La ciudad sumergida" de Flores GalindoFoto: Archivo PUCP

Este año, el Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Católica del Perú ha reeditado La ciudad sumergida. Aristocracia y Plebe en Lima. 1760-1830. de Alberto Flores Galindo, libro originalmente publicado en 1984 por Mosca Azul. Sin duda, hay que saludar este esfuerzo en poner a disposición de un nuevo público un título tan demandado y que ciertamente es muy difícil de encontrar en nuestro país; de esta manera, lectores de otras generaciones pueden acercársele más allá del testimonio personal que predican sus contemporáneos y discípulos(1).

Esta obra clásica de la historiografía peruana, nacida a partir de la tesis doctoral del autor en Francia, trató de analizar las relaciones entre las clases dominantes y la “plebe” que habitaba en Lima durante el período de transición de la colonia a la República. En primer lugar, este libro demuestra que, durante el siglo XVIII, la aristocracia era ineficaz económicamente y llevaba una vida ostentosa que basaba su dominio en el poder colonial y en la esclavitud. Asimismo, Flores Galindo se preocupó por entender al segundo elemento de este binomio y en este podemos encontrar que se ampliaron los sujetos históricos en esta complicada trama, pues ahora el foco no se da solamente en el indio, sino también en la emergencia los afrodescendientes como personajes historiables y con nombres propios como bien señalan los historiadores Maribel Arrelucea Jesús y Cosamalón (2022)(2).

Las dinámicas sociales eran sumamente complejas y se manifestaban en la vida diaria de los diversos actores. La convivencia entre distintos grupos étnicos era indispensable, pero también inseparable del conflicto. De acuerdo con Flores Galindo, esta heterogeneidad de las clases populares, a menudo despectivamente llamada “plebe”, no hacía posible que existiese un horizonte común y que, por el contrario, se acentúo por la fragmentación de intereses materiales, sociales y políticos. Eso se debía que hubo una lucha constante de parte de la “plebe” por la sobrevivencia dentro de una ciudad violenta con tensiones étnicas y raciales. Asimismo, en la temprana República, no se logró desmoronar el equilibrio de sujeción entre la plebe y las clases dominantes (anteriormente “la aristocracia”), debido a la persistente fragmentación, las tensiones señaladas y la violencia cotidiana. Por esta razón, no era posible la gestación de un proyecto anticolonial sólido y, así, en términos sociales, la República era una mera continuación y extensión de la sociedad colonial.

Deseo resaltar algunos planteamientos sobre esta obra realizados recientemente por los historiadores Maribel Arrelucea y Jesús Cosamalón (2022). Ellos destacan la influencia de historiadores marxistas heterodoxos como George Rudé, Eric Hobsbawm y Edward Thompson en este trabajo de Flores Galindo. Estos historiadores buscaban establecer conexiones entre los individuos y la estructura social, explorando cómo las personas interactuaban y vivían sus experiencias dentro de estas estructuras. Con estas lecturas, Flores Galindo adoptó versiones nada cercanas a los marxistas dogmáticos, así como a los críticos de esta corriente en las universidades San Marcos y Católica respectivamente. El marxismo al que se acercaba Flores Galindo no era la versión estéril en la que primaban los conceptos antes que el desarrollo de la realidad histórica; es decir, un marxismo que priorizaba la teoría y posteriormente la confirmada en la realidad; llevando a que esta calcé en la teoría. En lugar de ello, Flores Galdino usó a Edward Palmer Thompson quien partió de la experiencia histórica y las clases sociales:

“despejar posibles prejuicios: las clases no tienen que existir necesariamente en toda sociedad compleja no son homologables con una determinada condición económica. Toda clase es una manera específica de expresar la totalidad social, donde los factores internos importan tanto como las relaciones de oposición y complementación con otros grupos. Queremos decir, en otras palabras, que la clase social es, por encima de todo, una realidad temporal “definida por los hombres al vivir su historia”. (Flores Galindo 2023, 33).

Por lo tanto, la metodología de Flores Galindo no se cimentaba en una aplicación rígida del marxismo, sino en un enfoque flexible y empírico que partía desde la vida cotidiana y la experiencia de las personas comunes y marginadas, en contraposición a centrarse únicamente en las élites. En consecuencia, la obra de Flores Galindo ofrece una visión más íntima de las relaciones entre individuos y sociedad, además de cómo los sectores populares modificaban, se adaptaban y obtenían beneficios para sobrevivir en un entorno complejo y desfavorable.

Estas observaciones de Arrelucea y Cosamalón son sumamente relevantes para entender la obra de Flores Galindo en el contexto de su producción intelectual. También añadiría que, como producto de su época, la investigación de Alberto Flores Galindo refleja la narrativa predominante en su época, que promovía la noción de que todas las sociedades debían encaminarse hacia la revolución. En ese sentido, “la plebe” se presenta como un sujeto histórico que, debido a su fragmentación, no se ajustaba adecuadamente a estos ideales revolucionarios. Efectivamente, las clases populares limeñas no lograron subvertir el orden y transformar radicalmente la estructura social por su incapacidad de unir sus intereses. ¿Acaso no será por ello por lo que Alberto Flores Galindo trataría posteriormente encontrar como sujeto de su narrativa maestra a la población andina? ¿No era ella la que tenía en común la búsqueda de un Inca?


(1) Esta idea la sugiere Marcos Alarcón en una conversación con mantuvo con Lía Ramírez y Luis Rodríguez en una transmisión en vivo en la plataforma El Reportero de la Historia el año 2021. https://www.youtube.com/watch?v=ByGOhxWMBho&t=972s

(2) ARRELUCEA, Maribel & Jesús Cosamalón (2022). Sectores populares y esclavizados en Aristocracia y plebe. En: KAPSOLI, Wilfredo & PÉREZ GARAY, Carlos (eds.). Historiografía de la Independencia peruana en el año del Bicentenario (pp. 253-268). Lima: Universidad Ricardo Palma.